Puede ser que la pregunta sea no preguntarse por qué

Carmen, mil gracias por las risas, por los saltos, por los abrazos, por el cachondeo, por la confianza, por aguantarme... ¡¡Lo de ayer hay que repetirlo eh!! Todo me queda grande para no estar contigo.
Sabes que soñaré si no estás que me despierto contigo.
Este mar, cada vez, guarda más barcos hundidos.
Tú eres aire yo papel, donde vayas yo me iré.
Si me quedo a oscuras, luz de la locura, ven y alúmbrame.
Si en cada canción que escribo “corazón” eres tú el acento.
La pena está bailando con el llanto y cuando quiera bailará conmigo.
La vida apenas solo dura un rato y es lo que tengo para estar contigo.
Se torció el camino tú ya sabes que no puedo volver.
Ha sido divertido me equivocaría otra vez.
Quisiera haber querido lo que no he sabido querer.
Soñaré sólo porque me he quedado dormido.
No voy a despertarme porque salga el sol.
Yo sé llorar una vez por cada vez que río.
No sé restar tu mitad a mi corazón.
Puede ser que la respuesta sea no preguntarse por qué.
Será más divertido cuando no me toque perder.
Sigo apostando al 5 y cada 2 x 3 sale 6.
Como venganza de la buena suerte o recompensa de la mala vida…
Sobra la luz que me hace ver todo lo que yo escondía, no sé seguir no sé volver.
Una partida que jugué tan fuerte que ahora es la vida la que está partida.
Todas las cosas que al mar tiramos nos las devuelve siempre la marea, cuando más tratas de olvidarlo, con más fuerza lo recuerdas.
Que pena estar siempre pegado al suelo, el cielo queda demasiado lejos, tendré que soñar que puedo volar.
Un día la suerte entró por mi ventana, vino una noche, se fue una mañana, quizá solamente me vino a enseñar que viene y va.
Todas las palabras que te quiero decir se me rompen enseguida.
Me di cuenta tarde que te perdí por pensar que te tenía.
Y todas las noches me acuerdo de ti y te olvido cada día.
Y vuelvo a ser un loco para sobrevivir a la locura de la vida.
No me sale bien la cuenta de la vida, o me sobran noches o me faltan días.
Qué te voy a decir si yo acabo de llegar, si esto es como el mar, quién conoce alguna esquina.
Dejadme nacer que me tengo que inventar.
La vida es algo que hay que morder.
Tú siempre pides para nunca darme yo sólo pido lo que tú me quitas.
Sólo muere lo que olvidas.
Hay corazones llenos de agujeros, pero no lo saben.
He salido a la calle abrazado a la tristeza: vi lo que no mira nadie y me dio vergüenza y pena.
La justicia está arrestada por orden de la avaricia.
Menos mal que con los rifles no se matan las palabras...
Quiero estar cerca de ti, lo más lejos a tu lado.
Todo lo que no aprendí nunca se me ha olvidado, no he perdido la razón ni tampoco la he encontrado.
Sé que no puedo dormir porque siempre estoy soñando en invierno con el sol, con las nubes en verano.
Las cosas importantes aquí son las que están detrás de la piel.
Después de mucho tiempo aprendí que hay cosas que es mejor no aprender.
…A perder el miedo a quedar como un idiota…
¿No ves que por dentro estoy en ruinas?
Ya no sé si el mundo está al revés o soy yo que estoy cabeza abajo.
El mejor de los pecados el haberte conocido, tú no eres sin mi yo sólo soy contigo.
Demasiado acelerado, nunca encuentro mi destino.
Yo no sé si mis zapatos duraran todo el camino.
Nunca pido nada a cambio, eso es algo que he aprendido.
He aprendido en esta vida de lo bueno y de lo malo.
Después de romper la ola sólo nos quedó la espuma.
Voy mirándome en los charcos, yo no necesito espejo.
Veo el ojo que me mira, no sé que esperáis de mi.
Yo me muero cada día que tú te olvidas de mi.
Él camina despacito que las prisas no son buenas.
Él también quiso ser niño pero le pillo la guerra.
Escogiste a la más guapa y a la menos buena.
Sin saber como ha venido te ha cogido la tormenta.
Hay que ver que puntería no te arrimas a una buena.
Después de un invierno malo una mala primavera. Dime por qué estás buscando una lágrima en la arena.
Todos mis castillos son de arena, todo lo que sueño es tan frágil, todo lo que bebo es tu ausencia.
Y mi pobre corazón de hierro se me fue oxidando con las penas.
Muy pocas personas, demasiada gente.
Mi pobre corazón, todo lo bueno vivido.
Mi pobre corazón, siempre te echa de menos.
Mi pobre corazón, que no le caben ya las penas.
Mi pobre corazón, que me mantiene con vida.
Mi pobre corazón, siempre la luz encendida.
Todo lo que tengo que decir es que no tengo Nada que decir.
Lo mejor del sol… el brillo de la luna que es tu corazón.
Primavera ven y cúrame el invierno.
Cuando ya no sirven las palabras, cuando se ha rajado la ilusión…
Quise hacer un cielo en el infierno a ver si acertaba por error.
Ya no queda nada entre tú y yo, ya no queda nada entre los dos.
Cada cual que siga su camino, cada cual que baile su canción.
Tú destino dicen ya está escrito, el mío tengo que escribirlo yo.