Estrenando rincón

Se abre hoy ante mí esta nueva forma de asomarme a lo que me inquieta, de decir lo que pienso, y lo que no pienso, de hablar, de expresar, de reir, de llorar, de ser, de estar, de ... yo que sé... no sé lo que será esto, lo que acabará siendo para mi, si escribiré o lo abandonaré. Pero el caso es que yo también quería abrir una ventana mía, mía de verdad. Y eso hago, hoy...
Y qué mejor ventana que el sitio que más me gusta del mundo, mi acantilado, allí en la costa del norte de Lugo. Sitio al que me gusta ir cuando estoy agobiada y gritarle allí al mar, dar 4 gritos y soltar y desahogar, y volverme a mi casa sintiéndome mejor. Es un sitio mágico para mí, me gusta llevar allí a mis amigos, a la gente que quiero y que me importa. Me gusta ir también cuando me siento bien, sentir que la brisa del mar te entra hasta dentro, llenándote de aire nuevo, de aire limpio. Sentir las olas romper con furia contras las rocas, salpicarte incluso la cara y empaparte de esa sensación de paz, tranquilidad y bienestar que este sitio mágico me transmite siempre...