..A mi la culpa...

ÉCHAME A MI LA CULPA

Sabes mejor que nadie que me fallaste,

que lo que prometiste se te olvidó;

sabes a ciencia cierta que me engañaste

aunque nadie te amara igual que yo.

Lleno estoy de razones pa' despreciarte

y sin embargo quiero que seas feliz.

Que allá en el otro mundo

en vez de infierno encuentres gloria

y que una nube de tu memoria

me borre a mí.

Dile a quien te pregunte que no te quise,

dile que te engañaba, que fui lo peor,

échame a mí la culpa de lo que pasa

cúbrete tú la espalda con mi dolor.

Y allá en el otro mundo

que en vez de infierno encuentres gloria

y que una nube de tu memoria

me borre a mí.

Escuchando esta canción en la radio, no he podido evitar acordarme de ti, aunque sé que posiblemente nunca leerás este blog, y sinceramente no creo que tengas el más mínimo interes en leerlo a estas alturas del capítulo de esa que fue nuestra historia, si es que alguna vez existió...

Ojalá encuentres la gloria de la felicidad en tu vida, ojalá la hayas encontrado ya y hayas montado ese "lego desmontado" que decías era tu vida, ojalá...

Ojalá me eches la culpa de todo y te cubras la espalda si es eso lo que te hace sentirte bien y justificar tu comportamiento, ojalá...

Ojalá esas palabras que algún día pronunciaste se hayan esfumado de tu mente, ya que también se fueron de tu corazón, ojalá así no resuenen como eco lejano en tu conciencia, ojalá...

Ojalá pudiera despreciarte, y sentirme mejor así, pero no puedo, fuiste alguien importante y guardo de todo eso, sólo lo bueno, porque así lo he decidido y porque es con eso con lo que quiero quedarme, ojalá tu hubieras decidido lo mismo, ojalá...

Ojalá no exista una nube, sinó un nubarrón en tu memoria, que haga que me escondas bien, para que deje de salir en tus conversaciones, para que dejes de luchar contra los recuerdos y empañar las cosas que tú, como yo, sabes que vivimos y que están ahí, lo quieras o no, ojalá fueras la persona sincera que yo conocí y no negaras la realidad de lo que fue, y de lo que nunca será, ojalá...

Ojalá digas que fui lo peor, y ojalá te lo creas, si es que con eso te sientes mejor, ojalá un día seas capaz de decírmelo mirándome a los ojos, quizás con un café delante, ojalá ese día encuentre en tu mirada algún resto de la mirada de antaño, ojalá...

Ojalá te cubras tú la espalda con las cenizas que quedan de lo que fue, con las cenizas de lo que antes quemó, y quemó tanto que sólo quedan brasas ardiendo que están haciendo tanto daño, ojalá eches agua para apagarlas y dejen de quemarte tanto, ojalá...

Ojalá un día deje de sentir la inmensa pena que siento por todo lo que hemos salpicado a los demás. Ojalá algún día tu seas consciente de esas salpicaduras, ojalá algún día podamos ser igual de civilizados que un día lo fuimos y seamos capaces simplemente de mirarnos a la cara, ojalá...